Son muchas las máquinas que seguro que no conocemos pero que son utilizadas a diario por un montón de gente. Claro estamos acostumbrados a ver solamente coches, motos, autobuses, tractores, camiones etcétera que creemos que son los únicos que podemos encontrar, pero la realidad es otra muy distinta ya que son muchas las maquinarias que podemos encontrar aunque no sean usuales. Por ejemplo seguramente alguna vez nos hemos parado a pensar como hacen los barrancos para poder construir un edificio o una casa, pues necesitan las máquinas de las que os estaba hablando, por ejemplo la maquinaria de construcción entre la que podemos encontrar palas cargadoras, máquinas excavadoras, máquinas para extender, máquinas para compactar, máquinas para transporte de tierras, máquinas para transporte de hormigón, grúas, fresadoras y así un largo etcétera de máquinas que se necesitan si lo que se quiere es construir. Pero claro debemos saber que este tipo de máquinas son realmente caras y que también sus piezas lo son por lo que muchas veces los dueños intentan buscar soluciones para esas pequeñas averías que deja sus máquinas paradas.

Como bien sabemos hoy en día podemos encontrar desguaces de todo tipo y para todo tipo de vehículos, seguro que hay una web donde podamos encontrar estos desguaces y sin duda hacerles un favor a los constructores que todos sabemos lo que ha bajado su negocio. Hoy en día las construcciones no son como antes y aunque se siguen levantando viviendas nada tienen que ver con las que se levantaron  hace unos cuantos años, desde que saltara la burbuja inmobiliaria fueron muchos los constructores que tuvieron que dar el cerrojazo final a su negocio, muchos arruinados porque en pleno salto estaban haciendo algo. Claro todo eso se quedó parado y con ellos un montón de personas que se dedicaban de verdad a levantar los sueños de la gente de tener una bonita casa, fue todo como un dominó ya que al tratarse de una cadena después de los albañiles cayeron los electricistas y después los fontaneros y así todo un gremio que se vio en la calle en menos que canta un gallo. Por lo menos y para los que siguen trabajando les queda la tranquilidad de poder arreglar el vehículo que utilizan y no quedarse tirados en el intento. Un paso más para los desguaces que sin duda siguen ayudando a los más desfavorecidos.